La corte corta, hiere,
rompe, taja y da el tajo
con su cortejo, hace la incisión,
secciona, hace de la herida
su función de trazo
donde se cuela su plasma
y en la cortadura perviven
los cortesanos
asistiendo luego a su caja
para arrancar el botín
a las provincias
y huir hacia adelante
mientras su filo recorta
la libertad y anula la ley
cortajeada y demolida
como un cuerpo inerte
que venderán a precio vil
en el sacrosanto
mercado de las almas.
Casi en el fin de la incisión, los cortesanos
se toman una coca cola que sirve Rosatti
para celebrar un crimen.
* Escritor,
periodista, historiador.
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