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LA SALIDA DE GRAN BRETAÑA DE LA UNIÓN EUROPEA PERMITE RECLAMAR MALVINAS, por ALEJANDRO C. TARRUELLA*


 El 1° de enero amaneció en el sur americano con novedades favorables a la Argentina, que algunos se empeñan en que no salgan al conocimiento público. Al salir el Reino Unido de la Unión Europea, caen acuerdos internacionales que se sostenían dentro de su órbita.

 Días nuevos, nuevo horizonte

Un ejemplo es el Pacto de Madrid, que entregó Menem en 1991, que era la rendición de Malvinas en la práctica, y que fuera llamado en Europa “el tratado de Versalles argentino”, cosa de la que no se tomó nota en estos pagos. Además, significó una suerte de nuevo estatuto del coloniaje bajo, entre otras cosas, el cual se creó la CABA, ese territorio que su actual propietario en sombras, Rodríguez Larreta, pretende convertir en poco menos que un Mónaco del sur. Hubo para alcanzar ese estatuto, entregadores de toda laya, algunos de los cuales siguen en pie en procura de sostener el “legado británico” para su construcción político corporativa.

Todo poder intenta sustentar sus presuntos valores haciendo pasar la historia como un presente sin fisuras. Con la victoria de Trafalgar en 1805, cuando lo ingleses de Nelson aniquilaron a las unidades armadas de España y Francia, Gran Bretaña alcanzó uno de los momentos más potentes de su poder marítimo que llegó a contar con unas 20 mil unidades para manejar los mares. Devino el monopolio de los fletes, las bodegas, los seguros y los créditos de su propio aparato financiero más la colonización de territorios en varios continentes. Así fueron dueños de vida y muerte de sus prisioneros. Exportaron entonces, desde ponchos a países suramericanos y lo que fuere, más la cultura que tiene aún un peso muy fuerte. Bastaría analizar la influencia anglo en la CABA y alrededores, donde hasta los medios de comunicación parecen factorías británico norteamericanas de las corporaciones.

El Brexit es el comienzo del fin para esa etapa aunque por aquí se procure evitar el tema. El propio Perón aprovechó la caída del poder británico al fin de la segunda guerra mundial, y logró negociaciones históricas como la compra de los ferrocarriles cuyos terrenos pretenden vender hoy, caso Rodríguez Larreta como otros, para enriquecer negocios inmobiliarios corporativos. “La política es política internacional”, explicaba Perón, no es el feudo de cierta dirigencia propia y ajena, que se esfuerza por hacernos creer que no es así. Qué es la capacidad de ciertos personeros, de conseguir franquicias del poder para hacer sus negocios amparados en el poder político.

 Irlanda en la cancha

El Pacto de Madrid fue firmado bajo el arco de la Unión Europea y cae de hecho al quedar Gran Bretaña fuera de su órbita. En mayo pasado, el canciller, Felipe Solá, le expresó al ministro de Asuntos Exteriores irlandés, Simon Coveney, la “preocupación” del gobierno argentino por las “eventuales implicancias que el acuerdo con la Unión Europea, en el que se regula la futura asociación entre la UE y el Reino Unido, pudiera tener en relación con los territorios argentinos de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, que se encuentran bajo una disputa de soberanía con el Reino Unido”, según informó en ese momento el Palacio San Martín.

Solá expresó que Argentina “apreciará el apoyo de Irlanda para que el bloque europeo, en el marco del acuerdo comercial firmado con el Mercosur, se abstenga de incluir a las Islas Malvinas en las negociaciones que se llevan a cabo con el Reino Unido como consecuencia de la retirada de este país de la UE, de manera tal que la futura relación en la Unión Europea y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte no se aplique, ni tenga efectos en las islas”.

En días recientes, el 26 de diciembre, el Reino Unido y la Unión Europea acordaron el Brexit con reglas de juego nuevas que dejaron afuera de las mismas a los territorios británicos de ultramar Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur, bajo diferendos territoriales. Lo que faculta a la Argentina, para reclamar por los territorios usurpados y el fin definitivo del Pacto de Madrid.

Los británicos se resistieron siempre a aportar a los presupuestos europeos, a perder su moneda, y su identidad cultural. Fueron por el Brexit para crear un nuevo horizonte en la decadencia para negociar cara a cara con las potencias emergentes de la nueva realidad mundial. La venta de productos del mar usurpado en la Unión Europea, era la base económica de Malvinas y a partir de este 1° de enero, deberán pagar aranceles que pueden rondar un 18 por ciento. A su vez, las exportaciones de pescado, carne y productos agrícolas a la UE, suman alrededor de 300 millones de dólares anuales y un 75% del PBI de Gran Bretaña está atado al mercado común. La legisladora Teslyn Barkman, responsable de la cartera de Recursos Naturales y Brexit, dijo que su país está hoy frente a “una tormenta perfecta”.

Ahora entonces, es la hora para que Argentina recupere el terreno perdido y gane espacio en la recuperación de las Islas Malvinas, acabe con los efectos del Pacto de Madrid. Hay que observar quiénes son en el Estado y la política sus personeros, para que, al terminar la transición, la reconstrucción del tejido que lo sustenta, observe que se realiza en un tiempo de transformación del poder mundial que precisa respuestas nacionales y regionales efectivas.

El federalismo, el cambio de la capital, que se inicia con el tramado de las capitales alternas, y un horizonte de equilibrio en los desarrollos que contemple a la totalidad de las provincias, son claves para ir imaginando un cambio de Constitución y un país, que termine con los fantasmas que se arrastran desde ciertas negaciones. El papel del triunfo frente a los británicos en 1806 y 1807, que no figuran ni en los calendarios y la recomposición de algunos próceres como Güemes, del que este año se recordará el Bicentenario de su muerte, entre otros.

La tarea es ardua, pero el camino se ha iniciado en 2021 con la lucha contra la pandemia, en la cual la oposición ha jugado un papel nefasto, en el plan de continuar con el sometimiento a las potencias y la negación de democracia y justicia social al conjunto de los argentinos.

 

*Periodista, escritor, historiador.

 

 

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